En estos tiempos que la palabra empoderamiento esta tan de moda, para mi tan necesaria como caduca de tanto usarla, sin sentido, todas queremos expresar lo que somos, ser únicas, diferentes, encontrarnos, gritar a los cuatro vientos lo que llevamos dentro... pienso en estos collares y pienso que esto no es nada nuevo, que a veces tendríamos que mirar un poco a tiempos atrás, a lo más sencillo o natural…
Gurús de la moda, crean nuevas tendencias, innovan, repiten estilos de tiempos pasados, intentan acercarse a culturas fuera de este primer mundo y darles su toque moderno y transgresor.
Hoy me doy cuenta que no se necesita tanto pensar, que nos volvemos locas en nubes negras y que se necesita solo un collar, un collar que ya por su estética te hace pensar ¡¡guau!!! Cuando te lo pones, te ves en el espejo y eres tú, pero tu mejor tú, como, lista para comerte el mundo. Lo ves puesto en otra y dices… esa mujer es una de esas que... "arrasan por donde pasan".
Artesanías Masai
Pero el valor de las cosas no se queda solo en eso..., las cosas, son cosas, pero llevan mucho detrás. Y en este caso lo conozco poco, muy poco, mis dos neuronas peleas no dan pa mucho, lo sé, pero conozco algo… y entonces esa cosas dejan de ser cosas para ser SUPERCOSAS.
Este collar lleva mucho detrás, pienso en las manos..., en una persona a miles de kilómetros que ha pasado, no sé, una, dos, tres horas engarzando cada una de sus piedras, uniendo colores, pensando en que a miles de kilómetros hay otra persona esperando a encontrarlo, pensando en el momento en el que se lo va a poner, es una pieza tan especial para las dos…. Pienso en las conversaciones de esas mujeres mientras engarzan, en como será su vida, en cuáles serán sus inquietudes, en si serán diferentes o parecidas a las mías. Seguramente, las dos cosas, seguramente ellas, serán tan distintas como iguales a mí.
Seguramente ellas habrán llorado tan amargamente como yo, habrán sentido la risa que sale de las tripas por las cosas mas absurdas, habrán amado, habrán caído rendidas en el sueño satisfechas, habrán pasado noches en vela pensado en qué hacer para que las cosas vayan mejor para ellas y para el resto, habrán deseado que llueva o haga un buen día, habrán pensado en rendirse, hay tantos habrán… tan iguales pero en contextos tan distintos, eso es lo que hace la magia.
Pienso en esas mujeres que no se rinden ni por el clima, ni por el lugar donde nacen, ni por las cicatrices, ni por los daños, ni por los años, que lo llevan en su naturaleza, ellas y yo, tan diferentes y tan iguales y sin saberlo apoyándonos y siguiendo pese a lo que el destino mande, siguiendo, por los nuestr@s y por l@s vuestr@s, por nosotr@s.
Ese collar, que es solo un collar se convierte en pura vida. Para tí… se convierte en una posibilidad de dejar de sobrevivir para seguir viviendo con dignidad, tú y l@s tuy@s y para mí significa sentir ese poder y toda esa fuerza, y al final un poco de dignidad prestada, entre tanto primer puto mundo... sin saberlo, por eso me siento así cuando lo llevo, es algo mágico, sí. Tu y yo, somos una cada vez que me pongo ese collar, gracias... y perdón porque no es suficiente...
